La dermatitis atópica infantil es una llamada de atención para los padres
La piel seca y el picor son las principales características de la dermatitis atópica, una enfermedad inflamatoria crónica que afecta a alrededor de 20% de los niños en el primer año de vida, según la Asociación Brasileña de Alergia e Inmunología (ASBAI). El inicio de la enfermedad no contagiosa suele ocurrir en el primer año de vida y se mantiene intensa hasta los cinco años, con períodos de mejoría y empeoramiento. En niños y bebés, la dermatitis atópica suele aparecer en los codos, la cara o las rodillas y, posiblemente, en otras zonas del cuerpo. En los niños mayores, las lesiones se localizan en los pliegues del cuerpo, como el cuello, los codos, detrás de las rodillas, las manos y los tobillos. Son zonas más secas, oscuras y gruesas y, en los casos más graves, pueden afectar a gran parte del cuerpo.
La dermatitis atópica es de origen genético, es decir, no se transmite por contacto. Sin embargo, al tratarse de una enfermedad crónica, diversos factores pueden desencadenar brotes espontáneos, como sustancias perfumadas, ropa de lana y fibras sintéticas, baños calientes prolongados, estrés emocional, contaminación ambiental, cambios de temperatura, alimentos e infecciones.
Aún se desconoce la causa exacta de la enfermedad, pero los médicos creen que una combinación de piel seca e irritable y un mal funcionamiento del sistema inmunitario del organismo son algunas de las causas más probables. Sin embargo, la propia piel seca provoca picor. Cuando el niño se rasca, deja entrar sustancias irritantes, que pueden desencadenar nuevos brotes o incluso empeorar lesiones preexistentes. Este ciclo de picor, lesiones y picor suele ser largo y afecta a la calidad de vida de los niños, causándoles problemas de sueño e irritabilidad.
La piel atópica es siempre muy seca, por eso es importante tener cuidado al bañarse para reducir la sequedad, como evitar el uso de jabones, estropajos y agua muy caliente. El uso diario de cremas hidratantes corporales para controlar la dermatitis atópica es esencial para aliviar los síntomas y reducir el número de brotes. Además, mantener el entorno limpio y aireado contribuye a la eficacia del tratamiento.
Una vez que haya reconocido los signos, es esencial que acuda a un dermatólogo para iniciar el tratamiento adecuado. Para prevenir los brotes, aquí tienes algunos consejos que pueden ayudarte:
. El baño debe ser rápido y limitarse a una vez al día, ya que demasiado puede eliminar la humedad natural de la piel.
. Prefiera jabones y hidratantes para pieles sensibles e hipoalergénico.
. Opta por prendas de algodón, incluso para el uniforme del colegio... porque son suaves y ligeras, ayudan a que la piel no se caliente demasiado.
. Procura lavar la ropa de tu hijo con jabón líquido, sin suavizante, y haz un doble aclarado al final... así evitarás que queden restos de producto.
. Corte con frecuencia las uñas de su hijo... así reducirá las lesiones.
. Quita las etiquetas de las camisetas y no olvides lavar la ropa nueva antes de ponértela.
Fuentes:
https://www.spsp.org.br/2011/04/27/dermatite_atopica_ou_eczema_infantil/
https://www.sbp.com.br/especiais/pediatria-para-familias/doencas/dermatite-atopica-que-doenca-e-esta/
https://www.scielo.br/j/rprs/a/pf6NDckWfFt9RmWqnRbRqTb/?lang=pt
https://asbai.org.br/dos-20-das-criancas-com-dermatite-atopica-5-apresentam-a-forma-mais-grave-da-doenca-2/#:~:text=Cerca%20de%2020%25%20das%20crian%C3%A7as,aparece%20em%203%25%20dos%20adultos